Entrevista a Joaquín Díaz Cáceres - Pako Mulero Arenillas

Joaquín es un extraordinario comunicador que transmite su pasión por el cine, ya sea el más tradicional y normativo, ya por el “otro cine”, ese que habitaba en las estanterías de aquellos templos del alquiler o por el mítico vídeo comunitario. Con un excelente trabajo multidisciplinar que aborda diversos núcleos de la cultura de masas, nos hace llegar un mensaje de los que calan en el alma. En el plano personal, me identifico fuertemente con su forma de valorar y analizar muchos films que algunos consideran menores, pero que para nosotros van asociados a un hermoso recuerdo.

 

1. Cineasta, escritor, y protector de los géneros y subgéneros fantásticos. Cuéntame hasta dónde llega tu pasión.

Bueno, pasión y vocación, ambas definiciones pueden servirme, jejeje. Casi todos los recuerdos de mi infancia están relacionados con el cine: el cine de verano de mi pueblo dónde vi por primera vez las películas de Bud Spencer y Terence Hill o donde programaban sesiones dobles por veinte duros, aquel mítico espacio televisivo dedicado al cine de terror, “Noche de Lobos”, las horas que pasábamos mi amigo Satu y yo viendo el video comunitario en su casa, la cultura del VHS, los cromos de El Retorno del Jedi que coleccionaba… También las series de TV, el recuerdo de Diana tragándose el ratón en la serie V permanecerá en mi memoria para siempre, y hace que V sea mi serie de TV de referencia, de la que me declaro fan absoluto. Al final toda esta amalgama de referencias ha forjado mi formación audiovisual y me han convertido en un cinéfago empedernido; además sigo peleando para encontrar un hueco en este sector en el que meter la cabeza es tan complicado…

 

2. Menciona tus principales influencias en el séptimo arte.

Como te digo cuento con muchas, y muy heterogéneas… La verdad es que todo el cine de los años 80 me influyó de forma determinante, al ser la década en la que transcurrió mi infancia y primera adolescencia. Está claro que films como Gremlins, Cazafantasmas, Terminator, Robocop, Superman, Tron, Blade Runner y muchos otros, son una gran influencia, sin duda. A partir de ahí me gusta todo tipo de cine, aunque el género fantástico es mi predilecto. Dentro del género directores conocidos como John Carpenter, James Cameron, George A. Romero, Sam Raimi, Ridley Scott, son de mis favoritos. También otros directores menos conocidos por el público mainstream como Enzo G. Castellari, Lucio Fulci o Luigi Cozzi y, por supuesto, nuestro incombustible e incomparable Jess Franco. De los más actuales me interesan Rob Zombie o Ari Aster. Trascendiendo al género otros directores que me gustan son Fritz Lang, Truffaut, Hitchcock, Coppola, Berlanga, Ken Loach, Tarantino, Buñuel, Tim Burton… Como te digo, soy un consumidor omnívoro de cultura audiovisual…

 

3. Me consta de primera mano que amas el noveno arte, incluso has participado en algunos proyectos de relevancia.

Fui el co-guionista, hace algunos años, de un comic de zombies titulado Noctis Irae. Fue una experiencia en la que aprendí mucho y que me gustaría volver a repetir. Yo crecí también leyendo comics, sobre todo españoles, como los cásicos Zipi y Zape, Mortadelo y Filemón, El Guerrero del Antifaz, el Capitán Trueno… También era aficionado a revistas como 1984, Creepy, Vampus, Dossier Negro, El Víbora… Ya en la adolescencia me aficioné a El Jueves. Y también coleccioné algunas sagas como Luchadores del Espacio o Camelot 3000. Y por supuesto, como fan absoluto de la serie de TV V, compraba los comics basados en la serie que editaba en España Ediciones Zinco. Del comic actual estoy algo desconectado, pero me han gustado colecciones como la ya mítica The Walking Dead, me gusta la obra de Frank Miller y Alan Moore, me encantó el Maus de Art Spiegelman y, aunque no soy muy aficionado al manga, me resultó muy interesante la saga Fullmetal Alchemist.

 

4. ¿Cuáles son tus dibujantes y guionistas preferidos?

Como te he comentado antes Frank Miller y, sobre todo, Alan Moore son dos referentes para mí como guionistas de comics. V de Vendetta o Sin City me encantan, tanto en su versión comic como en sus versiones cinematográficas. Y como muy fan de Mortadelo y Filemón al trabajo de Francisco Ibáñez le tengo muchísimo respeto y consideración.

 

5. Tu pasión por el Fanzine como medio de difusión cultural.

El fanzine fue la herramienta más inmediata que tenía el aficionado al cine para compartir su pasión con otros aficionados antes de la irrupción de internet y el universo blog. En general, fue un medio de comunicación que en los 80 y en los 90 ayudó a la difusión de diversas corrientes culturales y políticas minoritarias. Y yo, desde muy joven, he colaborado en diversos fanzines y boletines autoeditados de todo tipo. Es un medio al que le tengo mucho cariño así que cuando surgió la oportunidad de impulsar, junto a otros compañeros, un fanzine dedicado al cine fantástico y la literatura pulp, además en estos tiempos dónde editar en papel cada vez está menos de moda, pues ni lo dudé, me metí de lleno en el proyecto. Me gusta ir a contracorriente, por eso soy un defensor acérrimo de la cultura fanzinera. Del mundo del fanzine, además, han surgido importantes autores y cineastas como Jaume Balagueró y su magazine Zineshock, o el prestigioso dibujante Carlos Pacheco, que dio sus primeros pasos en el mundo del comic participando en diversos fanzines en la provincia de Cádiz.

 

6. Háblame de From Outer Space.

Pues From Outer Space es un proyecto editorial que surge en 2016 impulsado por cuatro locos (entre los que me incluyo) que pretenden volcar sus filias cinéfilas y literarias en papel. De momento hemos editado 3 números (la periodicidad es anual) y estamos ya en plena preparación de la cuarta entrega. Comenzamos editando entre los cuatro, con la ayuda de Helena Castilla, que ha diseñado todas nuestras portadas, y con nuestro número 0 que tuvo 150 páginas, y a lo largo de este trayecto hemos contado con hasta 15 colaboradores, y un último número con más de 300 páginas… Además, nuestra idea es seguir promocionando el cine de serie B o la literatura pulp no solo a través exclusivamente de la revista, sino también organizando otras actividades y eventos.

 

7. ¿Qué opinas acerca de los iconos culturales y contraculturales? ¿Te ha marcado alguno en especial?

Primero creo que deberíamos definir con claridad la diferencia entre contracultura y la cultura mainstream. En algunos casos los límites son demasiado sutiles. Hay iconos que comenzaron siendo definidos como contracultura que han sido absorbidos completamente por las modas mayoritarias y que han terminado desnaturalizando su verdadero significado. A modo de ejemplo, si le preguntáramos a muchos de los que llevan una camiseta de Los Ramones por alguna canción del grupo no serían capaces de decir ninguna. Pero aún siguen existiendo iconos que mantienen la esencia por la que surgieron. La serie B o la literatura de género, por ejemplo, surgieron en un contexto muy determinado, siendo conscientes de su vocación no apta para todo tipo de públicos, pero se han convertido en un cauce absolutamente necesario en el que encuentran hueco expresiones que de otra forma no llegarían a la gente, o que tendrían más dificultad para hacerlo. Directores como George A. Romero, Tobe Hooper o Sam Raimi surgieron del cine independiente, en cierto modo contracultural (La Noche de los Muertos Vivientes, por ejemplo, rompió muchos esquemas, incluso raciales), y terminaron consolidándose dentro del cine industrial y mainstream. Son directores que a mí me han marcado especialmente; los zombies o ese terror desprejuiciado y gamberro son una verdadera delicia para mi paladar audiovisual.

 

8. Si te menciono el relato pulp, la novela de aduro, y las publicaciones weird, ¿qué te viene a la cabeza?

Se me vienen a la cabeza los bolsilibros, una expresión literaria que conocí muy tarde, pero que me ha cautivado por completo. Esas novelitas que, cuando era pequeño, veía como los adultos intercambiaban en los kioskos. Creo, sinceramente, que atesoramos un gran tesoro literario en todas esas novelas que publicaron durante la segunda mitad del siglo XX editoriales como Astri, Toray, Bruguera o Batería. Ciencia-ficción, terror, western, acción, los bolsilibros ofrecían entretenimiento de género en libritos de apenas 100 páginas escritos por algunos autores que han quedado olvidados. Sobre todos ellos destacaría a Juan Gallardo Muñoz, que firmaba sus obras con seudónimos como Curtis Garland, Donald Curtis o Addison Starr, bajo mi humilde criterio un gran narrador, o Pascual Enguídanos, autor de la mayor saga de ciencia ficción escrita en España, “La Saga de los Aznar”, que firmó bajo el sobrenombre de George H. White. Algunos consideran a todas estas obras como infraliteratura, pero creo que esta etiqueta es totalmente injusta. Son obras de entretenimiento que hay que reivindicar y poner en valor. Esto es lo que trata de hacer, desde hace algunos años ACHAB, la Asociación Cultural Hispanoamericana de Amigos del Bolsilibro, asociación que realiza una labor encomiable y de la que soy socio desde casi su creación.

 

9. Háblame del proyecto ACHAB.

Bueno, creo que mejor que yo te podrían hablar de ACHAB los compañeros que la impulsaron, que además llevan muchos más años que yo de amor por los bolsilibros. Pero como te decía en mi anterior respuesta es un proyecto que considero absolutamente necesario, y que está desarrollando una labor esencial y encomiable de reivindicación y recuperación de autores de bolsilibros, editando recopilatorios de novelas, además de facilitar el contacto entre aficionados para el intercambio de bolsilibros e información sobre ellos. ACHAB me ha ayudado a descubrir a muchos autores, y me ha facilitado el acceso a un formato literario que entretuvo a muchos españoles durante los años 60, 70 u 80 y que acercó géneros en aquellos años que no llegaban de otra forma a nuestro país. Además, tuve el honor de prologar una de sus últimas publicaciones, el tercer tomo de la Colección Robot, de Alan Comet, otra colección de ciencia ficción absolutamente imprescindible.

 

10. Estudiamos en la misma promoción de la Escuela Andaluza de Cinematografía (EACine) en diferentes turnos. ¿Qué recuerdos mantienes de aquella experiencia y promoción?

Yo procuro siempre extraer lo positivo de toda experiencia. Fueron dos años dónde aprendí muchas cosas sobre el sector audiovisual (no todas las que debería) y que me ayudó a conocer a algunos compañeros con los que sigo manteniendo contacto, como el roteño Héctor Espadas López-Tello, que ha publicado recientemente una excelente novela post-apocalíptica, “La Última Ciudad del Mundo”, novela que recomiendo encarecidamente.

 

11. La figura de la editorial independiente: Un día Applehead llama a tu puerta.

Más bien soy yo el que llamo a la puerta de Applehead. Conocía a la editorial por la publicación de un ensayo excelente sobre la Cannon Films y los seguía por RRSS. Vi una publicación en la que buscaban nuevos proyectos y les envíe la propuesta de escribir un libro sobre el cine post-apocalíptico. La recibieron muy bien, coincidía con una temática sobre la que querían editar y dieron luz verde. La verdad es que el trato ha sido sensacional, Applehead es un proyecto que muestra mucho cariño y respeto tanto por sus autores como por los temas que trata. Proyectos editoriales como Applehead son muy necesarios porque conjugan en sus publicaciones calidad con un gran amor por el cine.

 

12. Guerreros del mañana es un ensayo excelente, cargado de datos y películas más allá de la cúpula del trueno. ¿Cuándo y cómo nace el proyecto?

En primer lugar, debo agradecerte la valoración, de veras, viniendo de ti es un verdadero halago. Pues yo llevaba tiempo dándole vueltas a escribir un ensayo sobre este sub-género, ya que en castellano no encontraba nada sobre el tema. Algunos artículos en blogs y medios digitales, pero poco más. Había escrito también algún guion sobre la temática, también algunos relatos, siempre me han interesado mucho todos esos mundos post-apocalípticos y distópicos, no porque piense que pueden llegar a convertirse en una realidad, sino porque ofrecen muchas posibilidades para la fantasía y la ficción o para reflexionar sobre los peligros que se ciernen sobre nuestra sociedad. Creo que era el momento de que se publicara un ensayo de este tipo, y encima con la pandemia mundial que estamos padeciendo, incluso puede resultar algo anticipatorio, jejejeje

 

13. ¿Cómo fue el proceso de investigación y recopilación de datos?

El proceso se ha alargado más de lo previsto debido precisamente a la cantidad de información y datos que he ido encontrando. Comencé el proyecto con un listado de unas 190 películas, y al final he recopilado casi 300, de más de 40 países distintos, de los cinco continentes. Y a este extenso listado había que añadirle una dificultad, muchas películas, sobre todo las italianas, fueron distribuidas en los años 80 con distintos títulos. En los videoclubs podíamos encontrarnos la misma película con varias denominaciones diferentes. Esto ha sido una complicación añadida, pero, asimismo, el proceso de investigación ha sido muy enriquecedor, ya que me ha permitido conseguir mucha información sobre ese sub-mundo de las distribuidoras de VHS en aquellos años que podré emplear en otros proyectos. El sub-género post-apocalíptico es muy rico y diverso, con muchas propuestas que comparten códigos estéticos o simbólicos, pero con líneas narrativas que se bifurcan.

14. De las películas que mencionas y rescatas en tu ensayo varias me han llegado al corazón.    ¿Con cuáles has disfrutado más en su valoración?

La escritura de este libro ha sido ardua, pero la he disfrutado mucho. Más que en su valoración, diría que he disfrutado mucho con el visionado o re-visionado de bastantes: Las dos de Carpenter (1997: Rescate en Nueva York y 2013: Rescate en L.A.), la “trilogía bárbara” dirigida por Enzo G. Castellari (1990; Los Guerreros del Bronx, Fuga del Bronx y Los Nuevos Bárbaros), Waterworld, Mensajero del Futuro, Los Invasores del Abismo, la saga Mad Max, Turbo Kid, Stalker, 12 Monos, Cyborg, la etíope Crumbs…

 

15. Mad Max sienta las bases, pero también haces hincapié en la literatura como medio de inspiración apocalíptica. Háblame de ambas cosas.

El diálogo entre literatura y cine en el sub-género es un diálogo fluido y continuo. Muchos films están basados en novelas o relatos publicados con anterioridad. Te podría decir muchos títulos: La Carretera, La Hora Final, Hijos de los Hombres, Soy Leyenda (esta novela de Richard Matheson cuenta hasta con tres adaptaciones cinematográficas), The Postman, Metro 2033 (adaptada al videojuego), la novela juvenil española Mecanoscrito del Segundo Origen (cuya versión en cine se titula Segundo Origen) … Mención aparte merece la relación entre el cómic (sobre todo el anime japonés) y el cine. En el país nipón han sido varias las adaptaciones al celuloide de cómics manga de éxito: El Puño de la Estrella del Norte, la célebre Akira, o series de TV como Wolf´s Rain (su éxito televisivo derivó en la publicación en paralelo de su versión manga) o Dr. Stone…

Es en la literatura, durante el siglo XIX y principios del XX cuando surge el sub-género post-apocalíptico moderno, tal como lo entendemos hoy en día, con dos obras fundamentales bajo mi punto de vista: El Último Hombre, de Mary Shelley (la autora de la célebre Frankenstein) novela publicada en 1826, y La Peste Escarlata, de Jack London, publicada en 1910.

 

16. De todos los capítulos que comprenden el ensayo, ¿hay alguno que te guste especialmente? ¿Alguno te planteó una mayor dificultad?

No podría elegir uno entre los demás, porque todos han tenido su dificultad y su esfuerzo. A todos les tengo mucho cariño. Evidentemente, los relativos a Europa o Hollywood son más extensos porque cuentan con más películas, pero he querido reflejar en mi obra la amplia pluralidad y prodigalidad del sub-género, que se extiende por los cinco continentes, con films provenientes de cinematografías tan exóticas como Etiopía, Kazajstán, Perú, Brasil, Bulgaria…

 

17. La generación del Videoclub. Háblame de tu experiencia personal.

Yo pertenezco completamente a la generación del Videoclub. Y también a la del Vídeo Comunitario, que para mí son fenómenos que están estrecha e íntimamente relacionados. Y eso que en mi casa no tuve Video Comunitario, y el reproductor de VHS entró siendo ya adolescente. Pero me buscaba la vida para ver las películas que me interesaban. Recuerdo que de niño alquilaba películas junto a algunos amigos, y nos íbamos a casa de alguno que tenía reproductor, para verlas. Y muchas tardes que nos pasábamos en los videoclubes, sin alquilar ninguna película, pero dejándonos hipnotizar por todas aquellas carátulas, algunas verdaderas obras de arte. Y también pasé muchas horas y muchas tardes en casa de mi amigo Satu, mi mejor amigo, que tenía Vídeo Comunitario y nos veíamos las películas a pares. O grababa las que más nos gustaban y los fines de semana nos hacíamos maratones.  La década de los 80, y también los 90, fueron décadas en las que se fraguaron muchas películas míticas, que, a mí, y a los cinéfagos de mi generación, nos acompañarán para siempre. Y los videoclubs fueron auténticos templos (y también refugio) para los que amamos el cine. Sin duda, es una auténtica lástima que estén desapareciendo. Ojalá no desaparezcan del todo.

 

18. Tus compañeros de editorial han perpetrado trabajos excelentes. Háblame de alguna publicación made in Applehead que te haya calado.

La verdad es que la calidad de las publicaciones de Applehead es altísima. Tanto a nivel de contenido como de maquetación y edición. Se nota que son obras publicadas con muchísimo cariño. Me he podido leer casi todo, y lo recomiendo todo encarecidamente. Y no es por quedar bien, sino porque estoy convencido de lo que digo. Animo a todos los lectores a que se acerquen al catálogo Applehead, que van a encontrar cosas muy interesantes. Como fanático de Star Wars los libros relacionados con la mítica saga creada por George Lucas están entre mis favoritos: tanto La Guerra de las Galaxias, Spin Off como La Guerra de los Clones, Más Allá de Star Wars. Pero también son maravillosos otros como los de Javier Ikaz, Los Secretos de la IFD y la Filmark, Videonasties: Memoria de un Cine Prohibido, el libro de José Manuel Serrano Cueto sobre Jesús Franco… De verdad, me gustaría citar todos los títulos, pero, por desgracia, se haría demasiado largo para el lector. Mejor que pasen por la web de la editorial y echen un vistazo. A modo de último apunte, el libro Cannonwood: Cómo (casi) conquistar Hollywood es extraordinario, y tengo que felicitar a mi compañero, casi vecino, Pablo G. Naranjo, un grandísimo escritor. Su versión novelada, a medio camino entre la ficción y la realidad, de la historia de la mítica productora Cannon Films, chispeante, fresca, con una prosa ágil y eficaz debe de ser una lectura imprescindible para cualquier cinéfilo.

 

19. ¿En qué estás enfrascado ahora mismo?

Como siempre, en muchos proyectos. Como te comenté en una respuesta anterior estamos preparando el número 3 de From Outer Space. Colaboro también escribiendo artículos sobre cine y series con el medio digital La Voz del Sur. Ando escribiendo el guión de un largometraje, una docu-ficción muy relacionada con los años 80, los videoclubes y la cultura VHS. También estoy documentándome para un proyecto de novela que lleva años rondándome por la cabeza, y quizá pronto me decida a llevarla a cabo…

 

20. Proyectos de futuro.

Pues relacionándolo con la respuesta anterior tratar de llevar a cabo los proyectos en los que estoy trabajando. Mirando más a medio-largo plazo, tratar de encontrar el hueco en el sector audiovisual, sobre todo en el mundo del guión. Y, por supuesto, seguir escribiendo y charlando sobre cine fantástico, serie B y Z y literatura pulp (y todos los temas frikis que se tercie) tan bien acompañado como hasta ahora, incluso incorporando nuevos compañeros de viaje…

 

21. Muchas gracias por tus respuestas y tu valioso tiempo. Un abrazo fuerte.

 

Muchas gracias a ti, Pako, encantado siempre de acudir a tu llamada… ¡Larga y próspera vida a todos!